solex

¿has mirado alguna vez con detenimiento a los niños que se desesperan en la soledad de sus habitaciones entre juguetes y silencio?
lo que has visto (imposible que no) es cuando la soledad se inflitra en la risa o en unos jeans mojados después de un orgasmo. aquí la metafísica huele a cuerpo desenamorado. (a nada).

o bastaría que miraras detenidamente cómo rueda la soledad en una calle con escaparates iluminados y gente que pasa con la mirada turbia para voltear la esquina y buscar algo diferente. podría ser la noche en los parques ruidosos donde la gente canta o en una biblioteca misteriosa.

te hablaría de demonios que te arrancan de la soledad y te cuentan algo esperanzador, mas sabes que mentiría. los demonios no cuentan historias felices.

soledad por soledad, vamos, como si hubiera nieve que no se derritiera bajo el sol. y silencio hasta que el cuerpo se solaze junto a otro cuerpo. después la brisa, la tormenta, la espuma, las máquinas, el bosque.
al fin la ciudad llamada soledad, como la sangre y los laberintos.

solex del cuerpo o finitud. no eres robot y los fantasmas están al otro lado de la historia. la soledad puede ser radiante o el enemigo que te escupe su baba cada día.

escrito por rain(v.m.t) agosto de 2007. lima-perú.